Llenos de alegría y agradecimiento concluyen Diplomados de Pastoral Juvenil y Pastoral Vocacional
Con una ceremonia especial y sugerida por los mismos alumnos, la tarde del viernes 25 de marzo de 2011 concluyeron estos dos meses de formación en el Itepal.
Con una ceremonia especial y sugerida por los mismos alumnos, la tarde del viernes 25 de marzo de 2011 concluyeron estos dos meses de formación en el Itepal.Llenos de alegría y agradecimiento concluyen Diplomados de Pastoral Juvenil y Pastoral Vocacional.
Con una ceremonia especial y sugerida por los mismos alumnos, la tarde del viernes 25 de marzo de 2011 concluyeron estos dos meses de formación en el Itepal los diferentes agentes de pastoral que estuvieron cursando los Diplomado en Pastoral Juvenil y Pastoral Vocacional: jóvenes laicas y laicos, religiosas y religiosos y sacerdotes. Todos ellos conformaron grupos muy especiales en el Itepal de los mejores y más entusiasmados grupos que han dejado huella en nosotros.
Concluyeron con una Eucaristía de acción de gracias llena de fervor con un coro como siempre bien representado; la presentación de las ofrendas se dio con una danza latinoamericana donde con sus trajes típicos presentaron al Señor su agradecimiento; todos recibieron también al término de la Eucaristía, una cruz que acompañó el envío solemne que se les hizo. No pudo faltar el almuerzo festivo en torno a la convivencia fraterna y la música ofrecida por uno de nuestros alumnos de la licenciatura.
La entrega de los Diplomas se hizo en el Auditorio del Itepal en el que se presentó un video como muestra de todo este tiempo de bendición. Cada uno recibió su Diploma, fruto del esfuerzo y estudio en este tiempo; sin faltar también las palabras muy amenas y expresivas de los mismos alumnos de cada Diplomado:
“No sólo hemos estudiado sobre pastoral vocacional, sino que esto ha significado reencontrarnos con nuestros propios procesos…No hay duda que esto no sólo vitaliza nuestras comunidades sino que engrandece nuestra propia llamada” (P. Claudio Ríos, Pastoral Vocacional).
“Una experiencia enriquecedora que nos muestra la unidad en tanta diversidad, que tenemos muchas cosas en común y que las diferencias nos ayudan a cultivar la paciencia, el respeto, la caridad y las críticas. Somos un excelente grupo, y como no sabemos cómo han sido los otros, podemos decir que, es el mejor grupo que ha coincidido y esta coincidencia hará que cuando escuchemos el nombre de un país, ya no pensemos en una nación, sino en el nombre, el rostro y el gesto de un buen amigo…” (P. Mario Díaz, Pastoral Juvenil).
y desde luego la foto grupal con los directivos del Itepal. Brindaron después de la ceremonia con alegría y agradecimiento y compartieron sus últimos momentos en esta aventura formativa latinoamericana que Itepal les brindó.
Ahora vuelven a sus países, diócesis y trabajos pastorales que cada uno tiene, desde luego, con nuevas herramientas, una visión fortalecida y mucho entusiasmo por extender el reino de Dios a quien pedimos los llene de bendiciones hoy y siempre en todo lo que en su nombre realicen como buenos discípulos y misioneros.
La riqueza más grande del Itepal y los mejores promotores del Instituto son su alumnos. “Tu presencia nos enriquece”. Gracias por ser parte de esta experiencia latinoamericana.
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